¿Quieres mejorar tu sonrisa con ortodoncia pero te resistes a ponerte brackets? ¿Quieres enderezar tus dientes sin que nadie lo note? Ya es posible gracias a la ortodoncia invisible. Una respuesta estética, higiénica, indolora, cómoda y eficaz a tus necesidades y una alternativa a la ortodoncia tradicional.
¡¡Se acabó el miedo al dentista!!
¿En qué consiste una ortodoncia invisible?
En primer lugar se realiza un escaneo y estudio de la boca y dientes del paciente mediante tecnología 3D. De esta forma, se puede planificar todo el tratamiento y saber de antemano la colocación y posición de la ortodoncia en cada diente.
En función de estos resultados se fabrican los alineadores, que son de un material similar al plástico o la silicona.
Muy importante saber que los alineadores de la ortodoncia invisible son a medida para cada persona, de forma que encajan perfectamente con la forma de sus dientes.
Los alineadores se suelen cambiar cada 15 días aproximadamente, en función de la planificación que se haya hecho en el estudio previo.
Ventajas y beneficios de la ortodoncia invisible
La primera es la estética. Al ser una ortodoncia transparente es prácticamente invisible a simple vista, solo el paciente sabrá que lleva la ortodoncia.
Los alineadores se pueden quitar en cualquier momento, por ejemplo, aconsejable para comer y a la hora de lavarse los dientes.
Son cómodos, fáciles de mantener y además, al poder extraerlos, permite cuidar más profundamente la higiene bucal.
Al ser una ortodoncia a medida, se suele se evitar la aparición de llagas por problemas de rozaduras.
Es un tratamiento completamente eficaz que asegura resultados definitivos.
No es un tratamiento excesivamente largo, suele tener una duración de entre 9 y 18 meses.